En México, acceder a las redes sociales es la segunda actividad preferida de
los cibernautas luego de revisar el correo electrónico. Es innegable el boom
de su uso dado que, de acuerdo con datos de la AMITI, nueve de cada 10
mexicanos participan activamente en las redes sociales, usando al menos cuatro
distintas, ya sea para su uso laboral o profesional.
El gran favorito entre los connacionales es Facebook, pero en esta red social
también se está gestando el cyberbullying. Un reciente estudio de la firma de
seguridad informática McAfee dejó ver que dos terceras partes de los
adolescentes han sido testigos de conductas crueles online, conocidas como
cyberbullying, mientras que uno de cada cuatro afirma ser objeto de esta
práctica. Para completar la escena, solo 10% de los padres está al tanto de que
sus hijos son víctimas de acoso cibernético.
A decir de los respondientes, entre las redes sociales que se emplean para
ejercer este tipo de bullying predomina Facebook, con 92.6% de conductas crueles
detectadas. Le siguen Twitter, con 23.8%; MySpace, con 17.7%, e Instant
Messenger, con 15.2%.
Cabe mencionar que el grupo más vulnerable son las mujeres de entre 12 y 15
años de edad. Según explicó Adriana Jordán, gerente de Cuentas de Retail de
McAfee, el 47% de las mujeres adolescentes ha sufrido ataques de cyberbullying,
siendo 35% de los hombres los participantes como atacantes contra las
mujeres.
Existen diversos tipos de cyberbullying:
- Ataques de internet, consistentes en peleas que se desarrollan en línea
- Hostigamiento, que es el envío de mensajes ofensivos de parte de un atacante al muro de su víctima
- Difamación, que significa publicar en la red social de una persona rumores que dañan su reputación
- Suplantación, que consiste en crear una cuenta a nombre de otra persona utilizándola para malos fines
- Bromas pesadas, en las cuales el cyberbuller cruza la línea del respeto burlándose del acosado y exponiéndolo online
La navegación Web sin las medidas adecuadas también pueden poner en riesgo a
los adolescentes. Según el estudio de McAfee, casi la mitad de los jóvenes (46%,
para ser exactos) acceden de forma accidental a pornografía online, lo que los
hace vulnerables a diferentes peligros.
Las sugerencias para evitar que los niños y jóvenes queden expuestos a este
tipo de problemas incluyen usar opciones de configuración de seguridad y
privacidad de los sitios Web; contar con herramientas de software para proteger
el acceso a sitios cuestionables por parte de los hijos, además de filtrar los
contenidos inadecuados para ellos; controlar la cantidad de tiempo que los
adolescentes pasan conectados e impedir el contacto online con desconocidos.
Fuente: www.bsecure.com.mx/
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