Un estudio presentado por Core Security encontró que los
directores generales de las compañías poseen una escasa o nula
comunicación con los responsables del área de seguridad informática.
Esta situación, según informes de los analistas, le cuesta a las
organizaciones más de US$30 mil millones al año a nivel global.
Según la encuesta realizada a 100 CEOs y 100 CISOs/especialistas en
seguridad, más del 36% de los directores generales señaló que los
responsables del área de seguridad informática (CISO por su siglas en
inglés) nunca les reportan sobre el estado de seguridad de la
infraestructura de TI, en comparación con un 27% que informó recibir
actualizaciones de ellos con cierta regularidad.
Los CISOs apuntan directamente a la fuerza de trabajo como su
principal preocupación para la seguridad basándose en la baja de
educación y agilidad de los empleados, lo que representa la amenaza
mayor para la infraestructura de TI de las compañías.
Los CEOs creen que los ataques externos de phishing
representan la mayor amenaza para las organizaciones y que las empresas
cuentan con tiempo y recursos suficientes para capacitar y educar a sus
empleados para mitigar los peligros potenciales.
“Estos resultados deberían ser una llamada de atención para todas las
organizaciones para que exijan una mejor alineación entre los
ejecutivos responsables de la protección de los activos más importantes.
La idea que existan opiniones tan diversas sobre las amenazas cruciales
que enfrentan las organizaciones, al menos, desalentadora”, señala
Patricia Foye, vicepresidenta senior de marketing de Core Security.
Más del 60% de los CISOs aseguran estar preocupados por las
violaciones que sufren en sus sistemas de TI, aunque también fue
sorprendente que sólo un poco más de la mitad haya probado poner en
riesgo a sus propias redes para verificar la eficacia de su seguridad.
En contraste, sólo el 15% de los CEOs estaban tensos sobre los ataques a
sus redes.
Sin embargo, y a pesar de su confianza, el 65% de los directores
generales admitió no tener los datos necesarios para interpretar cómo
las amenazas a la seguridad se traducen en riesgos potenciales para el
negocio en general.
¿Qué queda? Es importante que los directores generales comiencen a
consolidar una alianza estratégica como los responsables de los
departamentos de TI y de seguridad informática para poder delinear
objetivos en conjunto que beneficien a la organización.
Fuente: cioal.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario